domingo, 22 de noviembre de 2015

Hasta el último respiro

Sumirse ¿Por qué no?
Bucear por la intimidad más profunda y recóndita…
Buscarte hasta encontrarte
Hallarte sin alarmarte
Reconocerte

Llenarte de intenciones
Desahogarte
Convincente de que estas vez lo lograras
Mostrarte que no solo eran vagas utopías
Emerger ¿Por qué no?

Atreverse
Mostrar las cicatrices
No claudicar
Resurgir ¿Por qué no?

¿Por qué si?
¿Para que?
¿Creer?
¿Otra vez?
¿Vanos intentos?

Remoza esa alma golpeada
Vivifica las ansias
Estas aun aquí
¿Preguntas para que?
Solo inténtalo otra vez…

Hasta el último respiro…

Mohíno

El mundo tras tus puertas
Habitante del infinito desconocido
Lúgubremente envuelto
Con corazas herméticas

El blindaje impenetrable
Impregnado de amargos recuerdos
Aísla el ímpetu
De tomar alto vuelo

Eres el caminante
Vacío de anhelos
Cuanto más quieres adormecer
Más intenso tu aliento

Silente
Lleno de murmullos internos
Ensordece los ecos
De sinsabores encuentros

Yermo
Infecundo de sueños
Quieres en lo profundo
Pero temeroso quedas

La cobardía de no poder
Aplasta tus días
Crees que nadie vigila tus pensamientos
Sin embargo yo los leo…

Me habitas...

Me habitas
En la evocación más profunda

Tanto así
Que te llevo conmigo vida tras vida

A veces cerca, otras no tanto
Pero solo basta que el mundo gire y regresas a mi

Me habitas
Como la melodía desencadenada e imparable

Habitas mi silencio
Mis sueños, mis segundos

Me habitas
Te habito y no existe el tiempo fatigado

Me habitas
Como el agua a su cuenca

Vives tan dentro
Que siempre me sientes y te siento

Tan así
Tan aquí

Más profundo que una huella
Trasciendes

Me habitas
Sin temor, sin vacilar

Me habitas
Sabiendo que no me perderás

Tan así
Tan aquí…

Tan mío
Tan tuya

Sempiterno…